Caminar por el Jardín del Edén
Alpe Adria Trail
En un viaje a través de la impresionante Eslovenia, descendiendo desde los Alpes Julianos hasta el Mar Adriático, uno se encuentra con mucha agua. Aguas cristalinas en forma de cascadas, lagos, ríos, arroyos, manantiales y finalmente el mar. Exploramos los puntos fuertes del Alpe Adria Trail, la ruta de senderismo de larga distancia de 750 km que va desde Austria hasta el mar Adriático en Italia. ¿Vienes con nosotros?
Las formaciones de piedra caliza de color gris claro dominan el verde paisaje boscoso de los Alpes Julianos, donde confluyen las fronteras de Italia, Austria y Eslovenia. Estoy caminando por el lecho de un río seco del valle de Trenta, en Eslovenia. A esta altura, el agua de estas montañas calcáreas, también conocidas como kársticas, fluye por el subsuelo. Estamos en julio y el sol del verano ya arde sin piedad sobre mi cabeza. Por suerte no tengo que ir muy lejos y mi abundante desayuno de salami, queso, aceitunas y mermelada de ciruela casera parece haber sido una buena preparación para mi paseo.
Un poco más adelante, el valle se estrecha y parece desvanecerse en un pequeño desfiladero. Sigo caminando entre las dos escarpadas paredes de roca y cruzo un arroyo que atraviesa el cañón. Mi objetivo está prácticamente a la vuelta de la esquina y el ruido es cada vez mayor. De repente, se oye un grito espeluznante que me sobresalta y me hace dar un paso atrás. ¿Hay alguien en peligro? ¡Debo hacer algo! Con decisión, sigo adelante en la última curva mentalmente preparado para entrar en acción, y me encuentro cara a cara con cuatro chicas que parecen tan aterrorizadas como yo.
Están en ropa interior, empapadas y temblando. Acababan de saltar a las “refrescantes” aguas de la cascada de Slap Zadnja, algo atrevido dadas sus temperaturas inferiores a los 10⁰C. Las chicas son de la República Checa y han venido a Eslovenia en busca de una sana dosis de aventura, naturaleza y senderismo por el Parque Nacional de Triglav. Aplazo mi plan de darme un chapuzón en la cascada, me despido de las chicas y vuelvo a pie a “Kekec Home”, la casa de campo en lo alto del valle de Trenta donde paso la noche.
De repente, se oye un grito espeluznante que me sobresalta y me hace dar un paso atrás. ¿Hay alguien en peligro? ¡Tengo que hacer algo!
Mi llegada a Eslovenia fue nada menos que espectacular. Desde Kranjska Gora, ascendí al macizo de los Alpes Julianos. Durante siglos, el paso de Vršič fue inexpugnable, pero durante la Primera Guerra Mundial, el ejército italiano necesitó construir una carretera militar a través. Más de 10.000 prisioneros de guerra rusos fueron puestos a trabajar en la carretera, y cientos y cientos murieron en condiciones miserables. Lo que entonces era una tarea casi imposible, hoy es aún más impresionante. Por el camino, desafié más de 29 curvas cerradas a miles de metros de altura al cruzar la frontera con Austria.
Alpe Adria Trail
Senderismo por el Jardín del Edén
El Sendero del Alpe Adria es una ruta de senderismo de aproximadamente 750 km que va desde los pies del Großglockner en Carintia (Austria), pasando por Kranjska Gora (Eslovenia), hasta Muggia en Friuli-Venezia Giulia, en la costa adriática de Italia.
El Sendero del Alpe Adria no fue diseñado como un sendero deportivo, sino principalmente como un sendero cultural. Las 43 etapas suelen tener una longitud de unos 17 km y pueden recorrerse en 6 horas. Numerosos senderos conducen de un lugar a otro por zonas no alpinas a través de caminos cargados de historia. Al final de cada etapa suele haber varios lugares donde parar para refrescarse y pernoctar.
6 etapas de la ruta atraviesan Eslovenia. Desde Kranjska Gora, se atraviesa el Parque Nacional de Triglav en los Alpes Julianos, se sigue el curso del río Soča hasta los viñedos de Brda, también conocidos como la “Toscana eslovena”, hasta llegar a la frontera con Italia por antiguos senderos militares cerca de Tolmin.
Para más información sobre la ruta, las etapas, el alojamiento y el servicio de equipaje, consulta la web:
Una característica típica de las montañas kársticas es que no hay ni una gota de agua. En el valle, en cambio, brota literalmente de las paredes, al igual que en el nacimiento del río Soča. El agua brota pura y helada de entre las rocas camino del Adriático. Sin embargo, antes de llegar al mar, el río esculpe estos impresionantes cañones en la roca blanda, donde las aguas de color verde esmeralda se transforman en un curso de agua salvaje de clase IV.
Las aguas de color verde esmeralda esculpen impresionantes cañones en la porosa roca caliza
La cascada de Mlinarica se encuentra a poca distancia a pie. Aunque es temporada alta, tengo la cascada para mí. Un poco más adelante, un sendero recorre el Soča, que aquí está especialmente encañonado, no menos de cinco metros de alto. Aun así, se puede saltar de un lado a otro. Hay indicios de que otros lo han hecho antes que yo, pero consigo controlarme.
TRAGEDIA EN EL FRENTE DE ISONZO
Hace casi cien años, durante la Primera Guerra Mundial, esta zona fue el escenario de algunas de las batallas alpinas más sangrientas que se libraron entre el Imperio Austrohúngaro e Italia. En el transcurso de tres años, murieron más de 800.000 soldados, y aún quedan muchas huellas de la guerra en estas montañas. En el museo de la guerra de Kobarid, las impresionantes exposiciones me permiten hacerme una idea de la miseria que tuvieron que soportar estos soldados. Salgo del museo profundamente impresionado, ahora consciente de la guerra de trincheras que hubo aquí, comparable a la de Verdún y Gallipoli en su intensidad y número de víctimas.
En el transcurso de tres años, más de 800.000 soldados murieron en el frente del Isonzo, y muchas huellas de la Primera Guerra Mundial aún permanecen en estas montañas
Durante la Primera Guerra Mundial, los italianos fueron muy punteros. Trazaron carreteras en lugares que nunca esperarías. La táctica dicta que los que controlan el terreno más alto tienen la ventaja sobre el oponente que está por debajo de ellos, y por eso se construyó la carretera de Mangart. Tengo muchas ganas de ver el amanecer desde la cima del Mangart, así que antes del amanecer salgo en coche hacia la montaña. La estrecha carretera apenas tiene la anchura de un coche y hay un desvío para el tráfico en sentido contrario. Subo a través de la niebla, emergiendo justo debajo del puerto de montaña. La vista desde aquí es fantástica en los días claros: al este se ven los Alpes Julianos y al oeste los Dolomitas. Hay más carreteras construidas por los militares, pero ésta es la única que ha sido asfaltada y accesible al tráfico. El resto se puede hacer fácilmente a pie.
Las montañas que rodean el valle de Soča están salpicadas de puntos estratégicos con búnkeres, posiciones defensivas, trincheras y tumbas de guerra. Algunas de las trincheras en las zonas más altas del campo de batalla apenas están a 30 metros unas de otras. Durante años, ambos bandos trataron de cavar túneles bajo las posiciones del otro para volar al enemigo desde abajo. Las trincheras de Kolovrat son de fácil acceso y han sido restauradas para que tengan el mismo aspecto que durante la guerra. Un hermoso y colorido mar de flores adorna el campo abierto entre los árboles, pero esta escena fue antes muy diferente. Durante la Primera Guerra Mundial, no había árboles y el paisaje era un gran mar de barro, salpicado de cráteres de bombas. Las verdes crestas de Kolovrat contemplan el valle de Soča y los montes Krn al otro lado, donde se encontraban las líneas austrohúngaras.
La vista desde Kolovrat es tal vez la mejor de todo el Camino del Alpe Adria: no sólo ofrece una vista impresionante de los Alpes Julianos, sino también una vista panorámica sobre la ruta hacia el Adriático. A partir de aquí, una etapa del camino sigue un tramo del famoso “Poti miru” (camino de la paz). Es aquí donde se sigue los pasos de un joven teniente alemán llamado Rommel. ¡Sí! El mismo que se hizo famoso como Mariscal de Campo en las batallas de la Segunda Guerra Mundial en el Norte de África.
CAMINANDO POR EL JARDÍN DEL EDÉN
Estamos en pleno verano y los agricultores están henificando sus tierras. Familias enteras rastrillan los campos. Acabo en Planina Bosca, un pastizal alpino cercano a la frontera italiana y lugar predilecto para los parapentistas. Es demasiado temprano para que yo esté allí, pero las cabras y las vacas hace tiempo que han sido ordeñadas. Janko acaba de poner el cuajo en la leche caliente. Y ahora está batiendo la leche cuajada. Es fabricante de queso de un colectivo de pequeños agricultores. Al remover se separa el queso joven del suero, y con una gasa lo saca del caldero de cobre. No hay nada mejor que el auténtico queso de montaña con un vaso de suero de leche al lado.
A medida que continúo mi viaje hacia el sur, el paisaje se va abriendo poco a poco y las escarpadas montañas dejan paso a un resplandeciente paisaje. Dejo el Soča y me desvío en dirección a la región vinícola de Brda, conocida cariñosamente entre los eslovenos como la “Toscana eslovena”. Con un poco de imaginación, es un nombre apropiado. La carretera que atraviesa las colinas está rodeada de viñedos a ambos lados, con pueblos e iglesias aquí y allá.
La región vinícola de Brda es conocida cariñosamente entre los eslovenos como la “Toscana eslovena”.
Los eslovenos son partidarios de la comida auténtica, y les gusta cultivar todo ellos mismos en sus huertas, olivares y huertos con árboles frutales. Sin pulverizar y sin tratar, puros y auténticos.
Estoy disfrutando del prsjut (jamón curado) casero, de los sabrosos quesos con agujeros de Tolmin, del aceite de oliva, del sabroso pan, de un fresco vino blanco Rebula y de un fuerte refosk tinto, ¡qué país!
Tras una parada en la bodega Ferdinant, una pequeña empresa relativamente joven que produce modernos y premiados vinos, desciendo hacia Trieste, la ciudad italiana que en su día formó parte del litoral del Imperio Austrohúngaro. Adiós prsjut… Bienvenido prosciutto!
Hisa Franko
Cena con Ana Ros, ‘Mejor chef femenina de 2017’
En Hisa Franko, en Kobarid, domina la mundialmente conocida chef Ana Ros. Ana es conocida por la serie de televisión “Chef’s Table” y sirve fantásticas creaciones culinarias en un ambiente íntimo y casero que son una fiesta para los ojos y el paladar. Reserva con antelación, ya que las reservas en este restaurante con 2 estrellas Michelin se llenan rápidamente.
Caminar por el Alpe Adria Trail
Alpe Adria Trail APP
¿Planeas hacer la ruta a pie? Descarga la aplicación Alpe Adria Trail.
Un componente esencial de esta app es la información detallada que ofrece de cada etapa: el recorrido, los lugares de interés y los establecimientos.
Los recorridos/etapas, incluyen todos los detalles del recorrido y las secciones relevantes del mapa, pueden almacenarse en un smartphone y se puede acceder a ellos sin conexión
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